Realidades irreales /
Unreal realities
Javier Maderuelo
El País, 2003
El País, 2003
El artista argentino Aníbal Merlo se interroga sobre la naturaleza de lo existente a través de sus pinturas, esculturas y fotografías. Paisajes y objetos como ruinas de una extraña irrealidad que se desdibujan en un aura poético.
Aníbal Merlo (Buenos Aires, 1949) se sirve de su obra para interrogarse sobre la realidad. Su pregunta no es filosófica sino que se plantea por medio del acto de mirar el mundo y las cosas para fijar las imágenes en una suerte de paisajes sin escala que corresponden a una geografía de hibridación, en la que lo material y lo imaginario se alternan y alteran mutuamente. El trabajo del artista, al contrario que el del filósofo, que pretende alcanzar las esencias, consiste en manipular las apariencias, en generar otros mundos y proyectarlos contra la tediosa cotidianidad. Parece ser aceptado que la realidad se caracteriza por la materialidad mientras que las imágenes soñadas se diluyen y metamorfosean como si fueran un fluido caprichoso sin forma definida. Sobre estos temas elabora Aníbal Merlo sus obras, que se concretan en pinturas, fotografías o esculturas, en las que hace continua referencia a lo material tangible pero en las que, sin embargo, la materia pierde realidad al ablandarse o torcerse, como si fuera a comcnzar a derretirse. No se trata ahora del empleo de un recurso más o menos surrealista, sino de una superación particular de ciertos tabúes sobre la mirada que aún pesan considerablemente en el mundo de las artes.
Through his paintings, sculptures and photos the argentine artist Aníbal Merlo interrogates himself about the nature of existence. Sceneries and objects as ruins of a strange unreality lose their outlines into a poetical aura.
Aníbal Merlo (Buenos Aires, 1949) makes use of his work to interrogate himself on reality. His question is not a philosophical one but raises by looking at the world and things to fix the images in a sort of sceneries without scale that correspond to a geography of hybridization, in which the physical and the imaginary are mutually alternated and altered. The work of the artist, unlike that of the philosopher who tries to reach the being, consists in manipulating the appearances, in generating other worlds and projecting them against the tedious routine. It seems to be accepted that reality is characterized by the materiality while the dreamed images are diluted and transformed as if they were a capricious fluid without definite form. On these topics Aníbal Merlo manufactures his works, which materialize in paintings, photos or sculptures, in which there is a continuous reference to palpable matter but again, nevertheless, matter loses reality after having been softened or twisted, as if it was going to begin to melt. It is not now a question about the employment of a more or less surrealistic resource, but of a particular overcoming of certain taboos that still weighs heavily on the look in the arts world.
Aníbal Merlo (Buenos Aires, 1949) se sirve de su obra para interrogarse sobre la realidad. Su pregunta no es filosófica sino que se plantea por medio del acto de mirar el mundo y las cosas para fijar las imágenes en una suerte de paisajes sin escala que corresponden a una geografía de hibridación, en la que lo material y lo imaginario se alternan y alteran mutuamente. El trabajo del artista, al contrario que el del filósofo, que pretende alcanzar las esencias, consiste en manipular las apariencias, en generar otros mundos y proyectarlos contra la tediosa cotidianidad. Parece ser aceptado que la realidad se caracteriza por la materialidad mientras que las imágenes soñadas se diluyen y metamorfosean como si fueran un fluido caprichoso sin forma definida. Sobre estos temas elabora Aníbal Merlo sus obras, que se concretan en pinturas, fotografías o esculturas, en las que hace continua referencia a lo material tangible pero en las que, sin embargo, la materia pierde realidad al ablandarse o torcerse, como si fuera a comcnzar a derretirse. No se trata ahora del empleo de un recurso más o menos surrealista, sino de una superación particular de ciertos tabúes sobre la mirada que aún pesan considerablemente en el mundo de las artes.
Through his paintings, sculptures and photos the argentine artist Aníbal Merlo interrogates himself about the nature of existence. Sceneries and objects as ruins of a strange unreality lose their outlines into a poetical aura.
Aníbal Merlo (Buenos Aires, 1949) makes use of his work to interrogate himself on reality. His question is not a philosophical one but raises by looking at the world and things to fix the images in a sort of sceneries without scale that correspond to a geography of hybridization, in which the physical and the imaginary are mutually alternated and altered. The work of the artist, unlike that of the philosopher who tries to reach the being, consists in manipulating the appearances, in generating other worlds and projecting them against the tedious routine. It seems to be accepted that reality is characterized by the materiality while the dreamed images are diluted and transformed as if they were a capricious fluid without definite form. On these topics Aníbal Merlo manufactures his works, which materialize in paintings, photos or sculptures, in which there is a continuous reference to palpable matter but again, nevertheless, matter loses reality after having been softened or twisted, as if it was going to begin to melt. It is not now a question about the employment of a more or less surrealistic resource, but of a particular overcoming of certain taboos that still weighs heavily on the look in the arts world.